jueves, 17 de abril de 2008

DIAS DIFICILES

Estamos en una situación política realmente difícil, por una parte, en la lucha contra el narcotráfico, los militares asesinan a civiles inocentes que por alguna razón no se detuvieron a tiempo en algún reten, en nuestra frontera sur, marinos acompañados por agentes de migración violan a mujeres que intenta cruzar a nuestro país. Legisladores que propiciaron y aprobaron la Ley Antitabaco fuman dentro del recinto legislativo. Una parte poderosa de la jerarquía católica defiende las limosnas que reciben de narcos.
El líder de los gasolineros presenta pruebas de cómo se ha favorecido a los Muriño, con permisos fast track.. El PAN avala el tráfico de influencias y convive con líderes corruptos como la de los maestros y petroleros, el PRI protege a gobernantes asesinos y aliados del narco. El PRD comete auto fraude, mientras el otro partido de “izquierda” (Alternativa), es alternativa de corrupción de sus líderes. Periodistas como Ciro Gómez, llaman a los miembros de la resistencia civil pacifica, protofascistas, divisores de la sociedad, antidemocráticos e instan a las autoridades a reprimirlos. El director de uno de los diarios más importantes del país (Milenio) cada miércoles se convierte en el bufón de los dueños de Televisa y llama pendejos a los legisladores en sus editoriales. En el canal 11 (del gobierno), se realizan “debates” sobre la reforma energética, en donde cuatro invitados y el “moderador” vapulean al único invitado disidente. En el canal 2 (privado), se invita al líder de la oposición no para entrevistarlo, si no para interrogarlo, callarlo, evidenciarlo, sacar cosas fuera de contexto, minimizarlo, tratar de ridiculizarlo y un largo etc.

¿Que nos queda por hacer?, me pregunto y realmente esta difícil, pero creo que la única salida es discutir, hablar, escribir, vigilar, exigir, protestar ante la injusticia, solidarizarnos con las víctimas y señalar a los victimarios.


Además opino que:
Nos tienen miedo, porque no tenemos miedo.

martes, 8 de abril de 2008

EL CLAVEL NEGRO

12 de septiembre de 1973, en la Ciudad de México, nos dimos cita en las puertas del bosque de Chapultepec, al menos 50 mil personas, para protestar por el golpe de estado que un día antes la junta militar de traidores chilenos, había perpetrado contra el Dr. Salvador Allende, Presidente Constitucional de Chile. La marcha, convocada por sindicatos, organizaciones estudiantiles, intelectuales y diversas organizaciones de la sociedad civil; era de coraje, rabia, luto. Luto por la muerte del Presidente y por que bien sabíamos de la masacre que se cernía sobre nuestros hermanos. Frente de la embajada estadounidense, los gritos y reclamos se hacían de manera especialmente fuerte, tratábamos de hacerles sentir que conocíamos de quién era la mano que alimentaba a los perros traicioneros. Llegamos al zócalo casi al anochecer, el poeta Renato Leduc, leyó un muy sentido comunicado condenando el golpe y pidiendo que todos los países del mundo hicieran lo mismo.

Casi treinta y cinco años después, me encuentro con El Clavel Negro, película producida por Suecia, Dinamarca, Chile y México y dirigida por el sueco Ulf Hultberg. En esta cinta participan los mexicanos Kate del Castillo, Daniel Giménez Cacho, Lumi Cavazos, entre otros y el actor sueco Michael Nyqvist quien interpreta al embajador sueco Harald Edelstam. Este embajador enfrentó a los militares, cuando trataron de atacar a la embajada de Cuba y logró la liberación de más de mil personas de diferentes nacionalidades. De estos hechos trata el filme, tratados con rigor histórico aderezados con cierta ficción para darles mayor redondeo a los personajes. Logro importante de la producción, es haberla filmado en los lugares reales donde sucedieron, como es el Estadio Nacional. El lenguaje que se utilizó para su realización es el ingles, supongo que para su mayor comercialización.

Gratamente sorprendido por la actuación de Kate del Castillo, quien en perfecto ingles y cuando se requirió, utilizó un acento chileno, para darle mayor fuerza e impacto a su personaje. Altamente recomendable esta película, que la puedo equiparar con lo mejor del cine político, al nivel de las producciones de Costa Gavras (Estado de Sitio, Z ).
Además opino que:
Nos tienen miedo, porque no tenemos miedo.